martes, 14 de julio de 2009

The Constant

Resulta que ayer por la mañana quien escribe, tras haber dormido solo tres horas, estaba en la puerta de la oficina tocando al timbre como un loco... Mi jefe vive en el mismo edificio donde tenemos el despacho, por lo que alternaba un telefonillo con otro. Nada. A veces, cuando el botón de la oficina enmudecía y probaba con el de su casa, una voz me pedía que le diese 30 minutos -que luego eran 60 ó 90- porque las sábanas, ya se sabe, tienen un tremendo poder de atracción, algo que yo también sé muy bien pero que ese tal Newton ignoró al centrarse en la caída de las manzanas. Pero ayer, tras media hora de guardia en la puerta de la oficina, con il iPod cojo -uno de los auriculares ha dejado de funcionar. Sí, lo que me faltaba en este caos tecnológico de ordenadores impotentes y cámaras rosas que me rodea... por no hablar de la imposibilidad de contactar vía telefónica con Palma de Mallorca...¿que tienen las máquinas en mi contra que han decidido sublevarse todas a la vez?- pero al menos disfrutando del solecillo. Sí, gracias a Dios el sol volvió a hacer acto de presencia el domingo después de cumplirse seis días de penumbra y lluvia... y después de arrepentirme durante seis días por haber deseado el fin del sol y el calor... pero el que no se presentaba era Dave... Obviamente a la media hora he dado media vuelta y me he vuelto a la resi... así, por la cara, dos horas perdidas...

¿Y por que a la resi? Un día soleado, un día libre... pero Jette -o como la llama Isa O-Jette- se ha convertido en la madriguera en la que espero a que pasen los días, simple y llanamente, sin obligaciones, sin responsabilidades, sin estudiar ni trabajar. Espero a que vengan a visitarme los del Barberán, espero a tener noticias sobre mi futuro profesional, espero a que sea fin de semana para que alguien me acompañe al Delirium... pero nada más, res de res que se diría en mi isla. Aishhh cuánto hecho de menos esos juegos de ordenador con los que he visto tantas veces amanecer... cómo hecho de menos el Civilization, el Empire Earth, el Sim City, el Age of Empires, el Geopolitical Simulator... creo que lo primero que haré cuando pise Palma será instalar todos esos juegos en el ordenata de mi hermana e invertir horas en abstracción. Y es que aquí la constante ha sido más bien el ocio... pero el ocio es caro y no estamos para derroches mientras el ordenata tampoco está por la labor de proporcionarme entretenimiento barato....Desde el lunes pasado mi jefe ha estado en España y en teoría debía llegar el domingo para trabajar el lunes pero... he tenido que enviarle yo un sms anoche para descubrir que la rutina -¿rutina he dicho? si la rutina, la constante, es precisamente resi...- se reanudará hoy martes.

Pero mucho antes de eso, mientras volvía del fallido intento de trabajar, dos caprichos que no suelen visitarme me han asaltado. Comprar verduras e ir a misa, fíjate tú. Ni soy muy religioso ni mi dieta es muy variada -salvo cuando como en casita- pero es que hay determinadas cosas que a veces el cuerpo te pide. Y ayer, cuando bajaba del autobús para ir a comprar la ensalada empezaban las campanas de la iglesia a repicar llamando a la misa de las 11.00, así que para allá que he ido, a esa misma iglesia picuda que veo desde la ventana de mi habitación, esa iglesia que es la primera muestra de civilización que aparece entre mi residencia y el resto de Bruselas, situada muy cerca del Carrefour es el centro de uno de esos núcleos donde se puede decir que hay vida, vida de barrio, o al menos vida más o menos organizada en vez de edificios autónomos e independientes como un hospital, un parque de bomberos o una residencia de estudiantes.

Y hoy nuevamente me siento delante del ordenador de la oficina a revisar todos los periódicos online de España. Uno tras otro. Empiezo con El Mundo y acabo con El País, como si fueran portada y contraportada después de haber pasado por El Semanal Digital, ABC, La Razón, Periodista Digital, Libertad Digital, El Confidencial, El Confidencial Digital, La Nación, El Imparcial, La Vanguardia, Estrella Digital, Libertad Balear... y cuando llego al último, vuelta a empezar, que para entonces seguro que el primero a actualizado. Y así no me queda más de una semana de 'curro'. Después visita de Ratochas, después visita de Markés... y después playa, fiesta y mucho, mucho entretenimiento en forma de juegos... sí, esa será a partir del 5 de agosto mi nueva constante.

3 comentarios:

Isabel mamá de Laura dijo...

Joer Germanitx, yo creo que O-Jette tiene un magnetismo especial que hace que tus aparatos electrónicos funcionen de una manera extraña... mira que las casualidades no existen. O-Jette podría ser la constante en tu portátil, cámara e i-pod, ya veras, cuando vuelvas a Palma irán de maravilla! :D así que... porqué esperar tanto para volver a la isla paradisiaca???

Sara dijo...

Alaaa venga a instalarte juegos en mi pc! jajajajaja!!

Será como el verano pasado, que siempre que llegaba a casa y abría la puerta de mi cuarto te encontraba a ti en el pc jugando!

Un besoo!!

Paquito dijo...

Hay que venirse arriba nene: la moral alta, sin rendición posible :-))

Te noto bien: a ver si este fin de semana tengo un ratito para actualizar el blog :-))

Un abrazote,

Paquito.