Somebody New

El 40% de los españoles no está contento con su trabajo según Antena 3, cifra que ascendería hasta el 70% si atendemos a todos esos trabajores temerorsos de que su jefe les vea en plan criticón en las noticias. La mayoría prefiere seguir pasándolas canutas antes que arriesgarse a sumergirse en el fango del desempleo y el ocho por ciento de los españoles sobrepasan las ocho horas reglamentarias de jornada laboral.

Mirad, esto no va conmigo. En cinco días hago tres meses en esta empresa. Hoy hemos presentado un Tender de tres Lotes, un trabajazo vamos. Ayer salimos de la oficina a media noche y como si nada, entre risas. ¿Ocho horas? Nunca, siempre más, pero da igual. Esta mañana a las 11 estregábamos la oferta después del checkeo de turno y la preparación de los paquetes... y aunque el trabajo no es picar piedra no solo las tareas cotidianas me sitúan dentro de esa minoría feliz y contenta con el trabajo que desempeñan sino el ambiente único que se respira en Avenue des Arts. 

Meri, no solo se acordó de mí en verano para darme la oportunidad que tantos me habían negado sino que no ha perdido en ningún momento la paciencia y calidez indispensables en este mundo cuando yo estaba histérico y de mala leche porque no nos habían mandado unos papeles o porque unas fechas estaban equivocadas. Solo con esa personalidad se puede trabajar el éxito. Solo una persona como ella puede dirigir equipos efectivos y eficientes.  Ella, una enciclopedia con patas que se conoce este mundillo como si fuera su isla canaria me contagia la pasión que le pone a cada proyecto y aunque tal vez yo necesite sus años de experiencia, o más, para enteder todo lo que significa lo cierto es que no podría tener mejor jefa, una jefa que además es maestra, mentora y, sobre todo, amiga. Después de semanas comentándole que en Navidades quería pedirle a los Reyes el curso Assimil de Francés, hoy, sin venir a cuento, me lo encuentro sobre mi escritorio junto a una nota: 'Este regalo es un poco por tu cumple, un poco porque me apetece...me alegro mucho de que estés aquí'. ¿Os lo podeis creer? Gracias tí Meri por darme la oprtunidad y perdóname si no soy más últil de lo que me gustaría ser!!!!

Sofía, la admiro. Mi vida profesional arranca rodeado de chicas y de los cuatro jefes que he tenido desde que empecé con mis prácticas tres han sido mujeres. Yo encantado. Sofía es la jefa ideal, la que cualquiera podría dibujar desde pequeño. Grecosuiza de cuarentaí, una eminencia en su terreno, lo da todo desde el principio confiando en la gente más incluso de lo que ellos confían en sí mismos. Me ofreció un super contrato sin a penas conocerme, guiándose por su intuición y las palabras de Meri, ofreciéndome mucho pero dejando la pelota en mi tehado 'ahora tienes que demostrar que mereces esta confianza' viene a ser su mensaje. Muy pocos pueden presumir de vivir una empresa que les estimula. La mayoría, lamentablemente, sienten que sus superiores les castigan y raras veces les aplauden. Mi cumpleaños siempre cae en mala fecha... la vida empieza en septiembre. El 16 del 10 está demasiado fresco como para que los nuevos amigos, en el cole, la Residencia Universitaria o el trabajo, se acuerden de tí y te feliciten. El año pasado fui al despacho de mi eurodiputado como si nada, nadie sabía nada, a nadie le conté nada, nadie preguntó. Un día más y a casa. Pero este año así, sin venir a cuento, recibí un mail interno de Sofía el 15, viernes, invitándome a la sala de al lado donde mis compañeros habían montado una mini celebración. Ni eso esparaba, pero la jefa me había comprado una tarta y había dedicado tiempo a mi cumpleaños... cuando desde los 18 los celebras fuera de casa, esfuerzos y detalles como esos saben muy dulce... muy dulce. Cuando ayer Meri y yo nos quedamos hasta las doce de la noche preparando el Tender, Sofía se quedó con nosotros aunque no tuviese nada que hacer porque el capitán es el último que abandona el barco. Hoy se ha tomado un merecido día libre y por telefono nos rogaba que nos tomásemos solo media jornada... al final hemos vuelto a hacer más de ocho de horas pero... ¿quien se queja en un trabajo así, en el que te valoran, en el que te sientes últil y apreciado? Y después de esto me siguen agradeciendo que un día en concreto me quede hasta media noche... 

¿Entendeis ahora que os comente en privados de FB, en mails, en SMS´s  que soy la persona más afortunada de Buselas?